Si tenés una galería en tu casa, comercio o quincho, sabés que ese espacio muchas veces queda inutilizado durante el invierno. El viento, el frío o la lluvia lo hacen incómodo… pero no tiene por qué ser así. Con un cerramiento de lona cristal, podés transformar ese ambiente en un lugar protegido, cálido y funcional durante todo el año.

✅ Ventajas de cerrar tu galería

1. Aprovechás el espacio todo el año
Con un buen cerramiento, la galería deja de ser “zona de verano” para convertirse en una extensión real del hogar. Ideal para reuniones, descanso o trabajo.

2. Protección contra el frío, el viento y la lluvia
Las lonas cristal permiten cerrar completamente el ambiente sin perder luminosidad ni contacto visual con el exterior. Generan un microclima más agradable y protegen lo que tengas adentro.

3. Más confort sin obras
A diferencia de una ampliación con ladrillos o vidrio, los cerramientos de lona se instalan rápido, no requieren obra y son mucho más accesibles.

4. Suben el valor del inmueble
Un espacio cerrado y funcional mejora la calidad de vida y también la valorización de la propiedad. Se convierte en un plus tanto si es para disfrutar como si algún día querés vender.

5. Estética personalizada
En Lonera A ofrecemos cerramientos a medida, con terminaciones prolijas, refuerzos donde se necesita y posibilidad de combinar lona cristal con otros colores, textiles o estampados.

🛠️ ¿Qué tener en cuenta?

  • Usá lona cristal de alta calidad para mantener buena visibilidad y resistencia.

  • Sumá cierres, tensores y aberturas que te permitan ventilar cuando haga falta.

  • Combiná con cortinas enrollables o toldos verticales si querés controlar el sol o sumar privacidad.

  • Consultá por instalación profesional para un resultado seguro, prolijo y duradero.

 

¿Querés disfrutar tu galería sin importar el clima?
Consultanos por opciones de cerramiento a medida. En Lonera A diseñamos soluciones que se adaptan a tu espacio y a tu estilo de vida.

Testimonio: “Ahora usamos la galería hasta en invierno”

 

 

"Antes, la galería de casa era solo para el verano. En cuanto llegaba el frío, se volvía imposible estar ahí por el viento y la humedad. Este año cerramos todo con lona cristal y fue un cambio total. Ahora desayunamos ahí, los chicos hacen la tarea, y hasta pusimos una estufa chica. Nos encanta porque entra luz natural y seguimos viendo el patio. Además, quedó prolijo y acogedor."
— Patricia, Barrancas (Santa Fe)